miércoles, abril 01, 2009

Bling bling

Mucho ojo con las oportunidades que la vida o la gente nos dan. Normalmente no suelen repetirse y luego ahí anda la gente desconsolada llorando o lamentándose por los rincones.
¿Pues qué pasó si ya no somos unos críos?
Si alguien te dio una oportunidad, para lo que fuera, y la desdeñaste ostensiblemente, ni pex, aprende de tus errores si es que puedes y te atreves.
Pero ojo, quién sabe si esa oportunidad se vuelva a presentar.
¿Ya ves, para qué cambiaste el oro por el lodo?
¿Por qué dejaste que te ganara el miedo o tu inseguridad?
Híjole, que difícil es que nos den una oportunidad, ¿verdad?



1 comentario:

Cas dijo...

Sí, ta cañon. Por eso hay que pensar bien las cosas antes de hacerlas. A veces pienso que soy muy condescendiente, y suelo dar una segunda oportunidad. Pero hasta esa la echan a perder jojojo. No mas. No mas oportunidades :D
besos