Un viejo amor

Sin planearlo, sin ni siquiera imaginarlo regresó a mi vida y como aquella vez hace tres años me doy cuenta lo mucho que me gusta y lo bien que me hace sentir, ya hasta fumo menos.
Bienvenida, otra vez, la yoga.
Claro que he perdido elasticidad y sigo aferrada a viejos miedos como pararme de cabeza. Dice el maestro que "algunos" de nosotros ---y eso lo dice sin quitarme la mirada de encima --hemos olvidado cómo rodar, joder tío la verdad es que yo nunca aprendí, jajaj. Con todo y que le pedí a mi mamá que me dejara un rato con el osito Towi, o como se escriba, pues no fue posible.
Pero me gusta, es un reto y sí, acepto.
Además n e c e s i t o relajarme.
Es oficial me urgen vacaciones en la playa.